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Escenarios para amar

Tres propuestas de temporada

Cuatro referentes de la decoración de eventos nos dan una muestra de su trabajo para este esperado especial. Con la esencia que los novios buscaban transmitir, y apoyados en su ingenio y buen gusto, lograron crear atmósferas de ensueño para celebrar el amor con una exquisita atención a los detalles. A continuación, nos cuentan en qué se inspiraron, cada uno con su estilo, pero de acuerdo en que todas estas bodas desprenden romanticismo.

Fotografías: Ismael Prado, El Faro Bodas, Rut Ortiz Montenegro y Aless Celauro.

Jardín de verano

En una posada boutique en el límite preciso entre las ciudades de Altos y San Bernardino –Tatano– se llevó a cabo esta celebración nupcial de estilo etéreo, despojado y con el sol de primavera en todo su esplendor. Canuto Rasmussen nos cuenta que los novios deseaban una ambientación que se mimetizara con el entorno, un privilegiado espacio con vista al lago Ypacaraí, y para lograr esto emplearon una paleta de colores naturales y elementos decorativos como pampa grass, carpetas de pirí encomendadas especialmente para esta ocasión, lámparas de mimbre y un sinfín de flores naturales en la gama del beige. La coordinación estuvo a cargo de Desirée Grillón y Adriana Saccarello Event Planning. Si bien la recepción estuvo marcada para el mediodía, la fiesta prosiguió hasta el final del día, y por esta razón confiaron en CF para la iluminación, que fue un factor clave.

Follaje, hojas de eucalipto y kokedamas con flores como rosas y astromelias también destacaron en esta propuesta. En el montaje también jugaron un papel esencial Gala y La Galería con su fino mobiliario, estructuras y toldos de Techo Móvil, y la coordinación del evento en manos de Desirée Grillón y Adriana Saccarello Event Planning.

Junto al río

Florencia Gwynn y María Paz Maluff fueron las artífices de esta decoración, inspirada en un parador de playa de Grecia y que buscó dar protagonismo al río Paraguay. Los contrayentes quisieron para la recepción un estilo relajado y este deseo se cumplió con el empleo de telares de lino, madera blanca, toques de mimbre e iluminación cálida. En el montaje final, destacó una pasarela con un túnel de madera que terminaba en una vista preciosa del paisaje natural, sitio ideal para la ceremonia de enlace civil. Los juegos de sillones descansaron bajo estructuras forradas también con lino y, por si fuera poco, sobre la barra de tragos colgaba una canoa encontrada en Remanso, que acentuó aún más la onda playera de esta boda. La elegancia de las orquídeas blancas combinadas con hortensias fue el toque natural en esta propuesta de Art Decor.

Atrevido edén

Villa María es un nuevo hotel situado en la villa veraniega de San Bernardino, y una de las primeras bodas celebradas en este encantador recinto lució una soñada ambientación encomendada a María Alejandra Maluff, Alesuki. La hora dorada y el tono bordó presente en las flores naturales, papelería, servilletas, almohadones y otros detalles ofreció un interesante contraste para un casamiento celebrado al final del verano e inicios del otoño, lo que logró una atmósfera atemporal. Destacan en esta propuesta el piso flotante sobre la piscina del alojamiento, estructuras que emulaban pérgolas y parraleras –ornamentadas con follaje– y también las mesas desnudas que dejaban ver las vetas de la madera oscura y otras vestidas con manteles en tonos naturales. La vajilla contó con posaplatos de ratán, juegos de copas y portavelas de vidrio labrados.

La boda contó con la coordinación de Camila Van Humbeeck para Passio y algunos de los proveedores involucrados fueron Gala, Alquileres Bella, Deco Depot, Celestina, entre otros.

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