Placer en cuarentena

Desde que empezó la medida de aislamiento preventivo, tuvimos que reconfigurar nuestra forma de relacionarnos con el mundo. Las visitas presenciales no son posibles, las videollamadas y las aplicaciones de mensajería se volvieron nuestro nexo con las personas, hasta esas reuniones que podían ser e-mails ahora son e-mails. Y la vida sexual no está ajena a estos cambios. 

¿Cuáles son los desafíos que existen para mantener los vínculos, la expectativa, la llama viva y sana durante este encierro? ¿Qué estrategias o cuidados deben tener las parejas que se encuentran en la distancia? Tenemos muchas preguntas, y por ello recurrimos a la Dra. María Mayeregger, médica sexóloga y educadora sexual. 

Pensando de vuelta en nuestro contexto, la doctora reflexiona que en los últimos 40 años el amor se vivió también en tiempos de pandemias como la del cólera, la del VIH/sida, y ahora pasa lo mismo en tiempos de covid-19. La llegada de esta nueva pandemia provocó todo tipo de sentimientos, a raíz del miedo, la incertidumbre y la falta de control. “Esta situación nos confronta con muchas cosas, nuestra fragilidad económica, social, física. En este contexto, las sensaciones eróticas pueden ser más difíciles de expresar”, comenta.

Como mencionamos en el especial sobre maternidad, es importante recordar que somos seres sociales. La posibilidad del tacto para las parejas es vital, por eso debe ser un recurso bien utilizado. La ansiedad, la depresión y el estrés son factores que pueden ser contraproducentes para la libido, y frente a esto la doctora sugiere analizar juntos este escenario, como pareja, así como la transformación acelerada de sus vidas para comprender los cambios en la rutina, las emociones, la economía y, lo más importante, no señalar el proceso del otro.  

“Esta situación nos confronta con muchas cosas, nuestra fragilidad económica, social, física. En este contexto, las sensaciones eróticas pueden ser más difíciles de expresar”.

Dra. María Mayeregger

Antes que nada, convengamos que el sexo es muy importante, pero llevar una vida sexual guiada por la comunicación, la comprensión y la empatía suena —y se siente— mucho mejor. La comunicación cotidiana, la familiar —si la pareja convive con sus hijos— y la comunicación erótica, por sobre todo, son los pilares y las principales herramientas para una convivencia de película. Lo que recomendamos para esta situación particular no es algo innovador o que descubrimos en este tiempo, son consignas válidas desde antes de la pandemia y que ahora se vuelven aún más pertinentes. 

Algo primordial es lograr un ambiente tranquilo y entrar en ese mood alejándonos de los dispositivos tecnológicos, de las noticias y los mensajes. Por ejemplo, entrar a la habitación sin los celulares, que el entorno se sienta libre de preocupaciones y que exista el presente más que nunca. La idea es evocar momentos placenteros y volcarse a la pasión que los unió en primer lugar. 

Antes de llegar a un encuentro íntimo con tu pareja, es ideal que te sientas bien contigo misma. Que ambos tengan un espacio propio, donde puedan trabajar tranquilos, descansar o simplemente disfrutar de un momento a solas, es importante para extrañarse y para ejercer una autonomía necesaria, ya que deben compartir la mayor parte de la casa. Este espacio será valioso para liberar todas las frustraciones, el estrés o incluso para tener un momento sexy contigo misma. En medio de una situación que pareciera apocalíptica, contar con un espacio seguro proporciona una sensación de control, como lo predijera Virginia Woolf allá por 1945 en A room of one’s own. 

La sexualidad del ser humano implica un universo mucho más amplio que el acto sexual o el contacto físico. Hay muchas alternativas para canalizar y explorar la sexualidad, como el autoerotismo, la seducción, el deseo, incluso los mimos y las caricias. El sexo es un importante regulador emocional y físico, por eso debemos evaluar los recursos más allá del acto en sí, por ejemplo, considerar la importancia de crear y sostener una fantasía, usando la voz y las palabras para excitar a tu pareja, comprender y descubrir las cosas que encienden al otro y, por supuesto, a vos misma. 

Para lograr esto, por menos romántico que parezca, también pueden recurrir a fijar horarios, o momentos en el día o en la semana en los cuales se dediquen exclusivamente a cargar esa energía sensual y activarla para eventualmente liberarla juntos. Ya sea la meta llegar a tener sexo o disfrutar de un instante íntimo, recordemos que la interacción social nos nutre, y por esa razón debemos trabajar la forma de relacionarnos considerando el contexto, que en este caso es una pandemia.    

En un artículo para el New York Times, Helen Fischer, antropóloga biológica, recomienda tips que aplica con su esposo durante el aislamiento. Al desayunar juntos, organizar un pequeño cronograma que contemple las actividades que realizarán durante el día, tiempo para trabajar, para estar a solas, para hacer ejercicio, etc.; así como momentos de pareja en los cuales puedan sentirse como en una cita, por ejemplo, una noche con una cena a la luz de las velas, y que esto implique un atuendo y una preparación previa acorde a la situación. 

Lo ideal es que revivan esas actividades que antes amaban hacer —ir al cine, salir a cenar, incluso bailar— y adaptarlas al espacio en el que están conviviendo. Un vestido, un conjunto de lencería que todavía no estrenaste porque no encontrabas la ocasión; y, por supuesto, la actitud que llevás puesta es lo más importante. Otra opción es siempre vestir bien para la cena, nada de pijamas ni esa ropa que usamos de “entre casa”.         

Si estás de pareja o estabas saliendo con alguien antes de que empiece la cuarentena, no te preocupes porque también tenemos tips para vos. Estos tiempos son nuevos, y lo bueno es que esto puede motivarte a encontrar nuevas fuentes de placer y autoplacer. El sexting es una de las principales herramientas para estrechar el vínculo sexual con tu pareja. Para los cuidados que esto implica te recomendamos que acudas a la página web de la organización Tedic. Ya sea utilizando fotografías, videos, notas de voz o simplemente textos, aprovechá para crear escenarios, historias y sensaciones que enciendan la llama en ambos.    

Según la doctora Mayeregger, a veces la distancia aumenta la necesidad erótica de la pareja; por eso, el contacto, así como la distancia y el espacio, son factores que a cada uno le afecta de distintas maneras. Aparte del sexting, también existen apps que proponen una variedad de juegos, incluso juguetes sexuales que pueden ser operados por una persona a la distancia. Es cuestión de dejar volar la imaginación, predisponerse a experimentar y aprender nuevas formas de conectarnos.