Red
Un tierno panda rojo rompe tabúes
Pixar lo logró una vez más. Todo el mundo está hablando de Red, su último estreno en la plataforma Disney+. ¿Sabés lo que hace a esta animación tan llamativa? Te contamos de qué trata este nuevo coming of age y qué dice directa y no tan directamente acerca de la pubertad.
Con Red, vemos por primera vez en una película animada de Disney-Pixar una caja de toallas femeninas y los cambios corporales de la pubertad en una misma escena, sin censura. La película se vale de un panda rojo, especie en peligro de extinción, para simbolizar los diversos estadíos hormonales y sociales por los que pasa una adolescente —sí, específicamente mujer— entre los 10 y 14 años aproximadamente.
Meilin Lee o Mei es nuestra protagonista. Ella crece en el seno de una familia chino-canadiense de Toronto, es el ojito derecho de su madre, la hija que todo padre quiere y la mejor alumna de su clase. Sin embargo, cuando llega a los 13 años, se desliza por un tobogán hormonal y, con ella, reímos, lloramos y nos enternecemos.
Un día, luego de una noche de intenso cringe, amanece convertida en algo parecido a un oso naranja. Se asusta, provoca destrozos en su habitación y finalmente se esconde en el baño, donde descubre su vello corporal y otras características del panda.
Su madre está extrañada, repasa las posibles causas del comportamiento de su hija y luego pregunta, en la versión latina: “¿Acaso la flor roja abrió sus pétalos?”. Muy preocupada, irrumpe en el baño con una caja llena de diversos tipos de pads y un montón de analgésicos. Desde este punto, la película se desarrolla en una metáfora bien elaborada de la menstruación, la amistad adolescente y los cambios de humor. Así, la niña aprende acerca de un legado familiar, algo oculto durante siglos por las mujeres de su familia.
APERTURA SÍ, TABÚES NO
No nos gustan los spoilers, pero queremos rescatar, al menos, dos citas de la película porque bien vale la pena abrazarlas, si ya pasamos por la pubertad, estamos entrando a ella o conocemos a alguien que les pueda dar uso.
Mei, en cierto momento del filme, recuerda que “las personas todavía hablan del Pandapocalipsis del 2002. Mamá y yo le decimos Aprendiendo a crecer”. En este punto, todas sabemos que lo que antes se envolvía en un secreto, silenciado y estigmatizado, es ahora un tema normal en su familia.
Además, Mei ya no es una copia de su madre porque está formando su propia personalidad, con altibajos, claro. Por eso, empoderada, informada y sin atisbo de vergüenza, escuchamos en un diálogo final: “Mi panda, mi decisión, mamá”.
La película llega a nosotros de la mano de la directora Domee Shi, ganadora de un Oscar a Mejor Cortometraje Animado en 2019 con Bao. Se destaca, también, por ser la primera película de Pixar dirigida únicamente por una mujer, con el equipo principal exclusivamente femenino.
Mientras, la actriz que presta su voz a Mei es Resalie Chiang y su madre en este universo animado es encarnada por Sandra Oh, conocida por sus papeles en Killing Eve y Grey’s Anatomy.
En una entrevista con la BBC, las actrices hablaron del tratamiento abierto, divertido y natural que da la película a temas controversiales de la pubertad como la menstruación. Chiang reveló que ella misma pasó por una transición hacia la adolescencia mientras filmaba la película y que “(La protagonista) es muy similar, pero diferente a mí; gruñe un poco más y tiene arrebatos más grandes”. Oh dijo claramente: “Todas la chicas tenemos el periodo. Así que vamos a normalizarlo, ¡y celebrarlo!”