El arte hecho moda

Encargado de cerrar el primer día de la Semana de la Alta Costura de París, Giambatista Valli llamó a la colección L’Instant y cubrió el set con globos de fiesta. El modisto italiano presentó diseños profusos en volantes, lazos, diamantes y plumas con el color blanco de protagonista, acompañados de plataformas extremas y gafas de sol XL con forma de mariposas. El tul acaparó la atención gran parte de esta entrega, pues invadió todos y cada uno de los diseños de grandes volúmenes que caían desde la cintura o en corte sirena. El broche final fue un vestido inmenso de tul rosa pastel, por supuesto.

Esta colección de otoño de 2022 marca su 15.º aniversario en la moda. La diseñadora holandesa se inspiró en Metamorfosis de Ovidio para explorar las múltiples identidades que pueden existir en los mundos físico y digital. En esta década y media, muchos de sus diseños combinaron técnicas de alta costura ejecutadas a mano con paneles impresos en 3D y materiales sostenibles e innovadores. Esta no fue la excepción, ya que incluyó fibras biodegradables de alta tecnología fabricadas a partir de algas y restos de cáscaras de cacao, así como una seda hecha de hoja de plátano. Todo esto empleado para trajes que se sitúan en el limbo entre lo orgánico y lo futurista, y que a menudo desafían la gravedad.

Petillant fue el nombre que Giorgio Armani encontró para su última colección de alta costura. El diseñador se inspiró al capturar la esencia fashionista de 1920 y 1930. Como a menudo hay algo de grafismo art deco detrás del trabajo de Armani, esta vez lo empleó para explorar sastrería oscura, sinuosa y piezas de noche en capas. El brillo no faltó ni tampoco el terciopelo, y hubo una gran cantidad de variaciones sobre la chaqueta de pedrería, estampados en blanco y negro y hasta paillettes con ramitas de flores en tono azul medianoche. Su punto de vista contiene multitud de opciones y siluetas, algo para cada tipo de ocasión y mujer posible.

Como un sello, Daniel Roseberry volvió a partir del negro como un lienzo en blanco sobre el que plasmar su universo para esta última colección de la casa Schiaparelli, con fuertes referencias a la botánica. El diseñador dejó de dar prioridad a la anatomía humana para centrarse en la flora, y en pequeñas dosis, a la fauna. Esta propuesta se caracteriza por un regreso absoluto al exceso de los años 80 con vestidos palabra de honor con metros y metros de tejido satinado, volúmenes imposibles de evocaciones florales, faldas tridimensionales, chaquetas toreras bordadas y hasta camisas con mangas amplias.

De todas las colecciones que te compartimos, esta es la más reciente, ya que se dio a finales de setiembre. En este desfile se apreciaron tanto las propuestas prêt-à-porter como alta costura para la primavera de 2023, ideadas por el diseñador Olivier Rousteing. Una combinación de diseños futuristas con una intensa labor artesanal, que se inspiran en el pintor francés Jean-Baptiste Frédéric Desmarais, el suizo Jean Étienne Liotard y el italiano Paolo Veronese, con referencias presentes en vestidos ceñidos, corsés, camisas y trajes. También destacaron los detalles arquitectónicos y tridimensionales, y piezas muy originales confeccionadas en rafia, como sombreros e incluso enterizos en ese tejido natural.

John Galliano presentó su espectáculo Artisanal y con él revivió la teatralidad en la moda. En lugar de caminar como en una pasarela regular, los modelos montaron escenas como si se tratara de una película. En este contexto se vieron abrigos de lana del Viejo Oeste con motas doradas, rematadas con sombreros de vaquero; vestidos de tul con bloques de color, que complementaron con accesorios como gorros de baño, e incluso un traje de payaso blanco y sombreros de brujas. Decenas de looks que exudaban la impronta del modisto.

Pierpaolo Piccioli se adentró en la búsqueda del glamour en lo imperfecto y alejado de los cánones. Por ello, desplazó la pasarela de París a Roma, donde la casa Valentino tiene su sede, y bautizó a esta propuesta como The Beggining. Presentó más de 100 looks tanto para hombres como para mujeres en los que primaron el colorido, los brillos y los volúmenes, sin dejar de ofrecer ligereza, con ondulantes volantes de tul y plumas como adorno recurrente. En esta serie regresó el tono rojo tan característico de la casa, que quedó relegado en su última colección por el fucsia. Esta fue también una colección que rindió homenaje a la herencia de la casa de modas y a su fundador, Valentino Garavani, al mismo tiempo que miraba hacia el futuro.