Micro Trends
Directo desde Copenhague
El street style de la Copenhague Fashion Week, si bien en un principio marcó el tono del estilo escandinavo, hoy es reconocido internacionalmente como una mezcla perfecta de practicidad, funcionalidad y mucho effortless. Las calles hablan y cada look es una clase magistral de cómo llevar prendas estructuradas con elementos fluidos o nostálgicos, siempre con un aire relajado pero muy pensado. Inspirados en las microtendencias, te traemos un resumen de las que se llevan esta temporada primavera-verano.
La era co-ord
Los conjuntos coordinados son una declaración que equilibra la practicidad nórdica con una creatividad desenfrenada. Algunos ejemplos tangibles son las prendas de sastrería oversize, los total looks de color y estampados e inclusive las combinaciones inesperadas de piezas, ya sea por sus materiales o su estructura. Una manera perfecta de lograr un estilo rápido y coherente.
Dress over pants
Esta es una tendencia de superposición un poco menos esperada. Inspirada en la era Y2K, la clave está en el juego de texturas y volúmenes. Admite combinaciones de vestidos lenceros con o sin encajes, pantalones holgados o jeans de pierna ancha. Un buen contraste también pueden ser los vaqueros rotos con un vestido vaporoso.
Casquetes en crochet
Los mesh hats o casquetes de croché son una de las microtendencias más comentadas y visibles actualmente. Como es, en esencia, un gorro tejido caracterizado por ser calado o tener una estructura abierta, está pensado para el clima más cálido y es perfecto para dar un aire despreocupado y artístico a cualquier outfit.
Un mucho de todo
Uno de los aspectos más cautivantes de la Semana de la Moda de Copenhague es que juega con la dualidad: es a la vez funcional y audaz, minimalista en la base y maximalista en el detalle. El layering —superposición de capas— y el más es más con prendas curadas, bien pensadas, son las herramientas perfectas que usan para lograr este equilibrio único.
Scarf style
Las pañoletas y las bandanas son un must absoluto en esta temporada. Se llevan en la cabeza, al cuello o de forma inesperada a la cintura, como un minipareo. Este uso se enmarca perfectamente en el estilo danés: es una forma sorpresiva, effortless y que agrega textura y color sin adquirir una prenda nueva.





