Cinematográfico y abstracto
Hablamos con Marcelo Martinessi, director de Las herederas (2018) y cortometrajes como Karai Norte (2009) y La voz perdida (2016), en esta entrega de HC Inspo, y te compartimos cinco curiosidades del hombre detrás de los filmes.
Estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad Católica de Asunción, pero encontró su mejor canal de expresión en el cine y se formó en New York, Londres y Madrid. Con su aclamada película Las herederas (2016), recibió dos Osos de Plata del Festival Internacional de Berlín. En estas líneas, descubrimos su amor por Bowie, su perro, y su admiración por La Babosa, de Gabriel Casaccia, que inspiró el nombre de su compañía de cine.
EN SUS INICIOS, LE HUBIERA GUSTADO
Ser asistente de dirección en ¿Qué pasó con Baby Jane?, de Robert Aldrich, porque se imagina que fue un rodaje divertido. “Todo se disfruta mucho más cuando aparte de talento y disciplina, también hay buen humor”, dice.
SU PASIÓN
Además de las películas, los libros y los viajes tanto físicos como abstractos, definitivamente le encanta pasear a su perro Bowie. “Me gusta dedicarle tiempo a las caminatas y a los juegos”, nos cuenta.
CUANDO HABLA DE LIBROS
Hay varios que le provocaron el deseo de que no se acaben. Los que él recomendaría son Confesiones de una máscara, de Yukio Mishima, y Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar.
UNA RELIQUIA DE SU HOGAR
También es un libro: la primera edición de La Babosa, de Gabriel Casaccia. Nos cuenta que “la obra entró a la España franquista y en la primera hoja tiene un ‘compromiso de responsabilidad’ del distribuidor que la importó, para hacerse cargo de su contenido.”
PERSONAJE FICTICIO
Conoce muchos, pero a ninguno le tiene afecto como a doña Ángela Gutiérrez, la Babosa de la obra casacciana, con quien le gustaría “salir a pasear por Areguá y que le cuente cosas”.