Dulce y acogedora

Nursery room

Las profesionales de Áurea Arquitectos crearon esta habitación para bebé en tonos pasteles e iluminación cálida. El espacio acogedor y utilitario, pues cuenta con todo lo necesario para el aseo y el descanso.

Edith Debernardi y María Paz Gulino, de Áurea Arquitectos, diseñaron esta nursery con ropas de cama y cortinas de fibras naturales como el algodón para evitar cualquier tipo de alergias al bebé. La decoración parte de una idea de género indistinto; es decir, la misma se puede adaptar tanto como para un niño o para una niña a través de la elección de los colores —aquí predominan gris, nude y blanco— y los tonos de la madera.

Este espacio debe ser tranquilo y acogedor, ofreciendo siempre comodidad a los usuarios. La elección de los muebles es clave, recordando siempre que menos es más. “Pensamos siempre en la flexibilidad que debe tener el espacio, adaptándose a los usos y funciones con el paso del tiempo”, dice Debernardi.

La profesional agrega: “Creemos que los detalles hacen la diferencia. Por ejemplo, optamos por subir un poco los tonos de colores, agregar cuadros temáticos y objetos que estimulen y despierten curiosidad del bebé”. En este caso, apreciamos cuadros y pequeñas figuras de animales, desde pequeños peluches hasta figuras de porcelana. 

Las profesionales acotan que la iluminación es fundamental a la hora de diseñar espacios como este. Es recomendable que, aparte de la luz convencional, la habitación también disponga de una fuente de luz más tenue y difusa, a fin de generar momentos de descanso y relajación. Sugieren colocar esta fuente secundaria en una pared o bien, como en este caso, optar por una lámpara de pie.