Yemanjá
La primera colección bridal de Morena Toro
La impronta de la marca de indumentaria paraguaya Morena Toro está en la innovación del encaje de ñanduti; Morena Toro es paraguaya, está hecha a mano, es poesía, es valor, es innovación, cultura y tradición. Esa amalgama está presente en su nueva colección de vestidos para novias, la cual conoceremos más a fondo en esta nota, además de las novedades que la marca tiene preparadas para el verano.
Por Nadia Gómez
Desde el primer desfile de Morena Toro, hasta la actualidad, hay 10 años de trayectoria; años en los cuales creció y floreció, cual flor inmortalizada en un tejido de ñanduti. Este año, Guadalupe Quiñones, la diseñadora al frente de la marca, nos cuenta acerca de su primera colección para novias, madrinas e invitadas. “Con esta colección quiero mostrar la diversidad de vestidos que podemos realizar con ñanduti, sin apegarnos a lo tradicional”, explica Guadalupe.
Si bien es su primera colección dedicada a novias, así como a madrinas, invitadas, graduadas y quinceañeras; no es la primera vez de Morena Toro diseñando vestidos de novias. La marca recibe muchos pedidos de vestidos para ceremonias religiosas, civiles, o para casarse en la playa. “Estoy constantemente realizando pedidos para novias que se casan en el extranjero, porque quieren llevar parte de su cultura a otros países”, agrega. Sostiene que cada novia es un nuevo desafío, que es importante escucharlas ya que todas traen su propio bagaje, su propia personalidad.
A través de una entrevista, Guadalupe colecta un poco de los matices de la novia para luego reflejarlos en el vestido. “El resultado es que se sienten ellas mismas con su vestido”, menciona. Esta nueva colección se caracteriza por la versatilidad que ofrece el encaje, la idea es mostrar que se pueden realizar vestidos de novias en todos los estilos y que ellas puedan enamorarse de sus vestidos al sentirse identificadas. “Cada novia es especial, y debe sentirse así no solamente el día que se casa, sino también al volver a recordar ese momento, y sonreír”, agrega.
Esta nueva colección es particularmente especial para la diseñadora; la considera un pedido a la virgen del mar, Yemanjá. En Brasil, sigue viva la herencia de la diáspora africana; en Salvador de Bahía, la primera capital del Brasil colonial, todos los años se festeja, cada 2 de febrero , la veneración de la orisha protectora del mar, la familia y la fertilidad que vela por el hogar, por los marineros y pescadores que habitan el mar. “La novia está vinculada a un pacto de amor perpetuado a través del matrimonio. De alguna manera este pedido está reflejado en cada uno de los vestidos”, acota.
La colección tiene como protagonista al ñanduti, como muchas de sus características prendas, el encaje más poético según Guadalupe; que junto a la influencia de Yemanjá concibe las nereidas del mar y los bordados de perlas que nacen del amor más puro. “Damos vida a novias elegantes con estilo propio, desde la más sobria a la más bohemia. Cada una de estas creaciones está elaborada a mano con una fuerza más poderosa que nosotros, el impulso mismo del amor”, reflexiona. Es por esto que la colección lleva el nombre de la divinidad del mar y la fertilidad, Yemanjá.
Morena Toro se caracteriza por crear un lenguaje adaptado a la delicadeza que requiere un vestido de novia. En palabras de Guadalupe, cada uno de los vestidos de la colección es un poema que lleva un nombre, es por eso que cada uno tiene un detalle diferente de ñanduti hecho a mano.
Todos los productos de la marca reflejan su identidad, que consiste en el respeto y la revalorización de la cultura paraguaya. Es un lenguaje que imprimen y que se ve reflejado en cada detalle, desde la materia prima hasta la representación de la técnica. “Cada uno de estos productos lleva consigo el amor por Paraguay, y así lo siente cada una de las personas que adquiere un producto de Morena Toro”, acota.
Lo autóctono hecho indumentaria
Guadalupe asegura estar enamorada de su profesión, y creo que las personas que conocen el trabajo y la calidad de las creaciones de Morena Toro pueden validar ese pensamiento. De los hitos más importantes de la marca está el momento en que se lanzó la primera colección, en 2009, en el Hotel La Misión, durante un evento del entonces Paraguay Alta Moda (PAM).
En 2013, la diseñadora decide dejar de trabajar en relación de dependencia, para dedicarse completa y exclusivamente a Morena Toro. Tres años después ganó el proyecto de fondos para emprendedores del Ministerio de Industria y Comercio (MIC), lo que le permitió construir su atelier y la primera tienda propia, que actualmente es la casa central, ubicada en el barrio Villa Morra, en la que proporcionan atención personalizada a todos sus clientes.
Guadalupe disfruta de estar en contacto con la gente, desde sus clientes, aliados, hasta los proveedores y artesanos. “Muchas de ellas son mujeres, agradecidas del trabajo que puedo darles, son personas que admiro mucho, no solo porque luchan por salir adelante, sino porque aceptan el desafío de trabajar de forma diferente haciendo un producto no convencional”, comenta.
Los desafíos también forman parte de su disfrute, cuando se presenta la oportunidad de trabajar en un proyecto diferente, como un producto innovador o que quizá ni siquiera está ligado al diseño de indumentaria. Como un ejemplo de esto, está la línea de cinco rosetas (orificio acústico en el centro de la caja de la guitarra) con diseños diferenciados, que creó para la tradicional Luthería Borja de la ciudad de Luque.
Por último, el proceso de diseño, el cual Guadalupe lo siente como un reflejo del inconsciente impreso en un boceto; la elaboración, cuando el producto terminado llega a sus manos y es fiel al resultado que tenía en su mente. Y por supuesto, la satisfacción de un cliente contento y agradecido con el producto.
Mientras escribo estas líneas, en Morena Toro ya están trabajando en la nueva colección de verano, con la cual la diseñadora espera poder sorprendernos con nuevas prendas en ñanduti y nuevos accesorios en cuero. “Estoy en un proceso de cambios personales y creo que eso se verá reflejado en esta colección. Por otro lado, me gusta explorar toda la riqueza que ofrece la artesanía del país, por eso, recientemente lancé una línea de prendas femeninas de ao po’i; esta es una técnica que me encanta y que, como el ñanduti, es parte de nuestra herencia colonial”, agrega. La idea de Guadalupe es continuar con nuevas prendas de esta línea para el verano.
Desde ya esperamos ansiosas la línea de verano, y todos los proyectos y novedades que vengan de Morena Toro. Si estás por casarte o tenés un casamiento importante al cual asistir, ya sabés, en el atelier de la marca puede que encuentres lo que necesitás.