Juana Viale
Fearless
El estatus de celebrity que ostenta Juana Viale es intrínseco. Si bien esto es primeramente heredado, me refiero a que hay algo muy natural en la forma en que su presencia envuelve a todos los presentes cuando llega. Puede que sea la sonrisa fácil –que muchos medios de su natal Argentina han puesto en entredicho, en medio de chismes–; puede ser su mirada honesta al responder las preguntas, que van desde su estilo personal hasta lecciones de maternidad, todo en una sola conversación.
Juana llegó a Paraguay el pasado 30 de octubre como invitada especial de Joyería Armele, para la presentación de la colección 2018-2019 de las joyas artesanales brasileñas Brumani. El coanfitrión de la noche fue Javier Saiach, quien presentó sus prendas para esta temporada, todas acompañadas por los complementos de Brumani.
La actriz viajó a nuestro país no para desfilar, sino para ocupar ese espacio reservado para las musas. De la mano de Saiach, saludó a los invitados y dio un paseo final por el salón, al son de los aplausos de mujeres que estaban ahí tanto por la moda como por ella.
Antes del show, conversó con High Class rodeada del lujo de la tienda de Armele, siempre cómoda, e incluso rodeada del exceso de brillo. Es que Juana no tiene miedo de la sencillez: para nuestras fotos no usa maquillaje y su outfit es sencillo en apariencia, hasta que notás la chaqueta de cuero bordada con aves y vegetación, el detalle que da el remate necesario al look. Así también, da lugar a la experimentación al prepararse para sus eventos, nunca teme tomar un riesgo y el resultado es siempre espectacular.
¿Cómo describirías el papel que juega la moda en tu vida personal?
Bueno, no soy una mujer que esté muy a la moda constantemente. Creo que lo que más priorizo es estar cómoda conmigo misma, que no significa usar lo que está de moda en el momento. Soy madre, así que estoy todo el día yendo y viniendo con los chicos. Entonces, tengo que estar siempre cómoda.
Pero sí me gustan los eventos, pensar mucho en lo que significa lo que voy a usar, planear cómo me voy a maquillar, peinar y qué colores voy a utilizar. Así soy, más que nada, en los eventos, sino priorizo el confort a la incomodidad (risas). Soy muy descontracturada.
Uno podría decir que lo que prima para vos es el estilo, no la tendencia. Siempre estás impecable hasta en fotos de paparazzis.
Tengo un estilo propio, pero natural, digamos. No soy una consumidora ferviente de lo que sale ni quiero tener lo último, todo lo contrario. Creo que combino cosas más viejas que tengo y las voy actualizando. Sí tengo un fetiche con los pañuelos, ¡me encantan! Siempre uso muchos pañuelos de colores.
¿Cómo preferís usarlos?
Los uso en la muñeca, como cinturones, en el cuello, colgados, los ato en mis carteras, me los ato en los pies. A veces me ato zapatos y arriba me pongo pañuelos.
¿Dirías que eso eleva tu look, por más sencillo que sea?
Yo creo que los detalles hacen la diferencia siempre.
Sos súper social y te gusta participar de eventos. ¿Cómo es el proceso de planear cada outfit?
Siempre trabajo con las mismas personas que me maquillan y me peinan, Javier Saiach me viste casi siempre y yo confío mucho en las personas con las que trabajo. Ellos me conocen a ojos cerrados y me gusta que sean artistas. Entonces, me pruebo un vestido dos o tres días antes, o me suele pasar que también me lo pruebo en el mismo día.
Más todavía cuando ya estableces una relación, como decís. ¿Cómo nació esa relación con Javier?
Con Javi ya fue hace muchos años. Me acuerdo que me probé un vestido suyo y enseguida me asombró.
¿Qué fue? ¿El diseño? ¿La sensación?
Mucho me gustaba el vestido. Me encanta cómo los trabaja, especialmente el género porque son muy delicados. Hace unos cortes que son divinos y ahora está con estos colores como la campera que tengo puesta (en la foto de la entrevista). Los amarillos y verdes me gustan mucho. No sé, fue un amor a primera vista.
Después de tantos años, él ya piensa en un vestido para vos y no hace falta pasar por todo ese proceso. Ya te lo lleva y lo usás.
De hecho, para el evento de hoy a la noche, yo no sé lo que me voy a poner todavía. Él me trajo un vestido. Yo me pongo la ropa de Javier y los vestidos, como guantes: te los ponés y que quedan… ¡ah, increíbles!
¿Ya te pasó eso de que te probaste un vestido que decidiste cambiar por otro a último momento?
¡Sí! Sí, pero con Javier me pasa que me pruebo algo y me encanta. Ya está, me quedo con eso. También me ha pasado que decidí usar algo y a último momento, radicalmente lo cambio por otra cosa. Pero radical, eh, de un verde y un corte, paso a usar brillo dorado. No tengo un patrón.
¿Decís que eso es parte de lo que atrae a la gente de vos? Ese factor inesperado de qué va a usar Juana Viale esta noche.
No sé si se genera eso, esa espera. No lo sé. Yo creo que soy muy espontánea, como que no podría ser de otra manera. Yo disfruto ser así.
Quizá eso es algo que te ayuda a disfrutar también.
Yo disfruto mucho. Todo el proceso es como un gran juego, es como convertirse en Cenicienta todo el tiempo.
Y cada look es distinto, es como una historia diferente.
Cada uno es distinto y me gusta eso también, cambiar constantemente.
¿Querés superarte en cada aparición?
No, me gusta hacer cosas distintas. No quiero que la superación vaya para arriba, sino para los costados, como una ramificación.
¿La familia de la que venís influyó en tu estilo?
No. Yo creo que toda mi familia, cada mujer de mi familia tiene su propio estilo, cada una es como es.
¿Cómo haces con tus hijos? ¿Te gusta vestirlos?
Tengo uno de 6, uno de 10 y una de 15. Ámbar (la de 15) ya conoce mucho su estilo, y Silvestre y Ali, que son los dos varones, también tienen lo suyo; hay cosas que les pongo y me dicen que no.
Creo que es necesario en la ropa, en lo estético y en la vida, que cada uno vaya trazando su propio camino. Una, como mamá, lo único que les puede decir es esto te puede hacer bien o no, pero la elección es de ellos.
¿Te ves explorando otras ramas dentro de la industria de la moda, haciendo una colaboración o una colección cápsula?
Ah, me encantaría, pero necesito tiempo porque para hacer las cosas bien, hay que dedicarse, pero sí que me interesa. Si lo hago, sería dentro de algo que se pueda usar todos los días, pero de lujo, con mucho estilo. Me gustaría hacer esa combinación.
Cuando no te vestís de para un evento, ¿qué usas?
Pantalones anchos. Me gustan mucho los colores y los géneros que tengan luz, como los tonos de amarillo, naranja, verde, fucsia y rosa.
¿No tenés miedo?
No, me encanta combinar.