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El arte de lo hecho a mano

Diseños pensados para un verano infinito

Mano de obra artesanal y conciencia sustentable caracterizan a los diseños de Magalí Pereira, fundadora de la firma Yute. Del deseo de crear algo que no solo reflejara su visión de la moda sino también sus valores, nació toda una línea de calzados y carteras inspirados en el estilo de vida mediterráneo y la esencia vibrante de nuestro país, que más allá de las tendencias, refleja un compromiso con el lujo responsable al emplear materiales naturales. En estas líneas, nos adentra en su proceso creativo.

Aunque se graduó como licenciada en Administración de Empresas, Magalí Pereira siente que su verdadero aprendizaje proviene de las experiencias que la vida le dio. Cada etapa, cada equipo y cada líder con quien tuvo oportunidad de trabajar le brindaron lecciones valiosas que hoy aplica en su día a día. “Todo este camino me preparó para llevar adelante Yute, una marca que no solo ofrece zapatos, sino que conecta con las personas, cuenta historias y busca generar un impacto positivo”, nos comenta.

Magalí Pereira, fundadora y propietaria de Yute.

Durante tres años, Yute creció en sus ratos libres mientras mantenía un trabajo fijo, pero en 2024 tomó la importante decisión de dejar atrás la estabilidad y dedicarse por completo a su marca. “Fue un acto de confianza en mí misma y en lo que estaba construyendo”, afirma.

Yute nació de su amor por lo artesanal y el deseo de crear algo que no solo reflejara su esti- lo personal, sino también sus valores. Magalí confiesa que “siempre admiré la riqueza del trabajo hecho a mano, busco destacar el talento de los artesanos paraguayos al promover una moda más sostenible”. Al principio, fue solo una idea impulsada por la necesidad de este tipo de productos en nuestro mercado, pero con el tiempo se transformó en algo que le apasiona profundamente.

De la unión entre el estilo de vida mediterráneo y la esencia vibrante de Paraguay, en 2020 surgieron calzados fabricados con yute, por supuesto, con telas 100 % de algodón, ideales para nuestro clima por su frescura. Alpargatas, espadrilles y zapatillas fueron concebidas para acompañar a las mujeres en sus momentos cotidianos y especiales.

El primer modelo de la marca, Monique — una alpargata con taco de 10 centímetros— sorprendió gratamente al combinar innovación y estilo en un mercado tradicional como el nuestro. “Monique marcó el comienzo de una nueva era para la marca, es una pionera en elevar un producto artesanal a un estatus de lujo”, relata.

De a poco, la firma evolucionó hasta convertirse en un proyecto con propósito: “Mi visión siempre fue que Yute fuera más que una marca de calzados; que se conectara con las personas, apoyara a las comunidades locales y transmitiera autenticidad en cada detalle”.

Cada modelo es producto de un proceso creativo que Magalí describe como un viaje constante, que comienza con moodboards de inspiración, sigue con pruebas de muestras y ajustes de calidad, y termina con el toque único que solo las manos de artesanas le pueden dar. Actualmente, están disponibles más de 50 modelos de calzados, con más de 200 variaciones en colores y texturas.

Los materiales empleados son naturales, como yute y algodón, mencionados previamente, a la par de cueros de alta calidad y detalles metálicos, para garantizar la comodidad y durabilidad. “Cada fase suma valor, y lo que resulta es una pieza auténtica, con historia y calidad. Mi parte favorita es ver cómo nuestras clientas hacen suyos esos diseños”, agrega.

POSTALES DE VERANO

Si bien Monique sigue siendo la gran favorita de las clientas, y las alpargatas tradicionales, el enfoque principal de la marca, la variedad de materiales le permite crear otros modelos según la estación, como botas, sneakers y bailarinas. También hay calzados para hombres y niños, y ampliaron la oferta con carteras, sombreros e incluso una fragancia, en busca de siempre brin- dar productos que reflejen estilo y comodidad.

La diseñadora comenta que se preparó para la temporada de verano 2025 con piezas únicas adaptadas a las tendencias del momento. Un ejemplo de ello es la colección cápsula de croché que incluye una tote bag, un bucket hat y alpargatas con base de yute y capellada de croché, todo diseñado para aportar frescura.

“En esta colección, introducimos tendencias actuales con colores neutros como nude, negro y blanco, con acabados metalizados. Innovamos con nuevos cortes y texturas naturales, además de hormas más ligeras para mayor comodidad”, añade.

LUJO SOSTENIBLE

“La mujer que calza Yute es alguien que valora la autenticidad y la simplicidad en su día a día”, nos explica Magalí y agrega que “no nos enfocamos en un perfil específico, sino que celebramos la diversidad de quienes eligen nuestros productos”. Es así como considera que su marca va alineada a las personas que buscan comodidad, frescura y una conexión genuina con lo que consumen, pues eligen opciones que reflejan su deseo de ser parte de un mundo más armonioso.

Por ello menciona al lujo sostenible, que para ella significa la unión entre diseño auténtico y responsabilidad: “Es el ejercicio de crear piezas únicas y de calidad que honren el trabajo artesanal, empleen materiales naturales de manera consciente y respeten tanto a las personas como al medioambiente. Más que un concepto, es nuestro compromiso con un futuro más ético y significativo”.

Rememora que el proceso de trabajar con artesanos fue un verdadero aprendizaje en conjunto: “El estilo que creamos es muy diferente a lo que se suele hacer a nivel local, por lo que hubo un periodo de adaptación. Por ejemplo, la horma del modelo Monique tomó seis meses en perfeccionarse, mientras que la puntada de Pía tiene su particularidad. Además, el trenzado del yute, que es una característica de todos nuestros modelos, requiere una técnica especial”. Después de todo este tiempo, reflexiona que fue un proceso lleno de aprendizaje y admiración, que le enseñó a valorar los tiempos, las técnicas y la dedicación que requiere cada pieza.

Los artesanos que trabajan con la firma provienen de diversas localidades de Paraguay, especialmente de regiones donde el trabajo manual es una tradición que se transmite de generación en generación. “Cada uno de ellos aporta su habilidad y conocimiento único, lo que les da a nuestros productos un valor artesanal auténtico y lleno de historia”, acota.

DE CARA AL NUEVO AÑO

Para este 2025, Magalí busca expandir la presencia nacional e internacional de su marca, a la par de fortalecer sus plataformas digitales y abrir nuevos puntos de venta estratégicos, siempre con su esencia artesanal y sostenible. Actualmente, cuenta con una casa central dentro del Paseo Die Ecke y otros dos espacios en el Paseo La Galería y en la villa veraniega de San Bernardino, durante esta temporada estival.

Cabe destacar que la demanda se extiende a otros puntos del Paraguay, en ciudades como Encarnación y Ciudad del Este, así como en países como Uruguay, Argentina y Colombia. “Por eso, este año con el equipo estamos enfocados en mejorar la experiencia de compra en nuestro e-commerce, para seguir acercando Yute a más personas alrededor del mundo”, finaliza.

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